Tudela

Tudela
Todos mis sueños

lunes, 28 de junio de 2010

El Circuito de Los Arcos, sus inversiones y sus constructores

Nuevamente en Navarra nos encontramos con otra inversión, de las que podríamos denominar de "gran calado", por lo elevado del proyecto y, no menos importante, por su dudosa viabilidad empresarial futura.

La parte positiva que inspira este proyecto se sustenta en la idea de incentivar la actividad económica de esa zona de Navarra, a través de una gran inversión que supuestamente, está por demostar, generará actividad deportiva, mediante grandes eventos y entrenamientos, y actividad económica mediante la asistencia de deportistas de la velocidad, aficionados al rugir de los motores y visitantes intrigados por este tipo de espectáculos.

Hasta aquí todo correcto. Lo incorrecto aparece más bien en lo referido al capítulo de ejecución material del citado proyecto. Este circuito foral de velocidad no está diseñado ni planificado por el Gobierno de Navarra, entonces de UPN y CDN. El Circuito de Velocidad de Navarra, ubicado en el municipio de Los Arcos, es una "brillante" idea de una sociedad constructora llamada SAMANIEGO.

El Parlamento de Navarra solicitó un informe especial a la Cámara de Comptos cuyas conclusiones han sido dadas a conocer, el pasado viernes, por la citada institución de fincalización. Muchas son las sospechas. Más las incertidunbres. Inmensas las duas.

Lo cierto es que el Gobierno de Navarra, con el dinero de los contribuyentes forales, sale al "rescate empresarial" de la mencionada constructora y, para ello, pone mucho dinero y asume muchos compromisos societarios.

Es decir, sin saberlo, a través de la Sociedad Instrumental Pública SPRIN, tu y yo, como los más de 620.000 contribuyentes navarros, tenemos un Circuito de Velocidad en Los Arcos. No sabemos el por qué y, los más trascendente, tampoco sabemos el para qué. No hay un Proyecto de Gestión, al menos no se conoce, que lo avale.

Deseo que esta operación sirva realmente para reactivar económicamente la zona de Los Arcos, de lo cual, como navarro, me interesa y ocupa. Además, espero que esta operación nada transparente no haya servido solamente para sacar del bache a un irresponsable empresario que se metió donde ni debía ni podía. Además de darle trabajo, sin concurrencia y sin competencia ni licitación pública alguna, en unos tiempos donde el sector de la contrucción ha sufrido su mayor azote de los últimos 20 años.

Como casi siempre, tu y yo junto a otros 620.000 navarros y navarras a apagar este "incendio" empresarial. Uno más. Que sea el último.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.